Como Responder Cuando Alguien Dice Que
LA IGLESIA NO TIENE AUTORIDAD PARA PERDONAR LOS PECADOS

 

Siguiendo la línea de Martín Lutero (el primero de los reformadores protestantes del siglo 16), los protestantes niegan que la Penitencia o Reconciliación sea un Sacramento y rechazan la idea de que la Iglesia tenga autoridad para perdonar los pecados en el Nombre de Cristo.

RESPUESTA CATOLICA

La Penitencia o Reconciliación (también llamada Confesión) es uno de los siete Sacramentos instituidos por Cristo. El Bautismo nos libera del pecado original (junto con cualquier otro pecado que hayamos cometido personalmente antes de ser bautizados), pero los cristianos podemos, desafortunadamente, retornar a un comportamiento pecaminoso, necesitando así la reconciliación con Cristo y Su Iglesia. Jesús estableció el Sacramento de la Penitencia porque El previó esta necesidad. (En vista de que el Bautismo no puede ser repetido, hubiera sido ilógico que Cristo no tomara providencias para perdonar a los pecadores bautizados). Afirmar que Cristo no dio a la Iglesia el poder para perdonar los pecados no sólo niega el conocimiento que El tiene de la naturaleza humana, sino que establece igualmente límites a Su autoridad y misericordia-algo que nadie tiene el derecho de hacer.

PASAJES DE LA ESCRITURA QUE SUSTENTAN EL PUNTO DE VISTA CATOLICO

Mateo 16,18-19 - "Y yo a mi vez te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y las puertas del Hades [infierno] no prevalecerán contra ella. A ti te daré las llaves del Reino de los Cielos; lo que ates en la tierra quedará atado en los cielos, y lo que desates en la tierra quedará desatado en los cielos." Comentario: Jesús dio a Pedro la autoridad para "atar y desatar", lo que incluye el derecho para perdonar los pecados en el Nombre de Cristo. (Perdonar y salvar a los pecadores es, después de todo, el interés primordial de Cristo y la razón para que El viniera a la tierra-así que es natural que involucrara a Pedro y sus sucesores en este mismo ministerio.)

Juan 2,23-25 - "Mientras estuvo en Jerusalén, por la fiesta de la Pascua, creyeron muchos en su nombre al ver las señales que realizaba. Pero Jesús no se confiaba a ellos porque los conocía a todos y no tenía necesidad de que se le diera testimonio acerca de los hombres, pues él conocía lo que hay en el hombre." Comentario: Jesús conocía perfectamente la naturaleza humana, como tal, El entendía totalmente la realidad del pecado y la culpa y reconoció la necesidad constante de los pecadores para reconciliarse. Como el hombre que edificó su casa sólidamente sobre una roca (cf. Mateo 7,24-25), El creó un fundamento sólido para Su Iglesia dándole la autoridad para perdonar los pecados.

Juan 20,21-23 - "Jesús les dijo de nuevo: «La paz esté con ustedes.» Y añadió: «Como el Padre me ha enviado, yo también los envío a ustedes.» Sopló sobre ellos y les dijo: «Reciban el Espíritu Santo. A quienes les perdonen los pecados, Dios se los perdonará; y a quienes se los retengan, Dios se los retendrá.»" Comentario: El Domingo de Pascua, Jesús dio a todos los apóstoles la autoridad para perdonar los pecados en Su Nombre y por el poder del Espíritu Santo-y puesto que el Espíritu reside siempre en la Iglesia (cf. Juan 14,16), los sucesores de los apóstoles también tienen esta autoridad.

Mateo 6,14-15 - "Porque si ustedes perdonan a los demás sus culpas, también a ustedes los perdonará su Padre celestial. Pero si no perdonan a los demás, tampoco su Padre les perdonará sus culpas." Comentario: Todos los cristianos deben perdonar a los pecadores y hacerlo (o fallar en hacerlo) será la base para el juicio de Dios. Si Jesús da esta autoridad y responsabilidad a los creyentes en lo individual, lógicamente es conferida de manera aún más grande e importante a la Iglesia de la que forman parte Sus seguidores.

Mateo 18,15-18 - "Por eso, si tu hermano te ofende, ve y llámale la atención a solas. Si te hace caso habrás ganado a tu hermano. Si no te hace caso, toma contigo uno o dos, para que cualquier asunto se resuelva en presencia de dos o tres testigos. Si no les hace caso a ellos, díselo a la comunidad; y si no hace caso ni siquiera a la comunidad, considéralo como un pagano o como uno que recauda impuestos..." Comentario: Jesús presenta aquí a la Iglesia como árbitro final de lo que está bien y está mal y como fuente última para perdonar los pecados en Su Nombre-tanto así, que los cristianos han de evitar a quienes rechazan la autoridad de la Iglesia.

2 Corintios 2,10 - "En realidad, quien tiene el perdón de ustedes, tiene también el mío, pues lo que yo he perdonado -si es que perdoné algo- ha sido por ustedes en atención a Cristo..." Comentario: San Pablo se refiere aquí al concepto de perdonar a otros en el Nombre de Cristo.

2 Corintios 5,18-20 - "Todo viene de Dios que nos ha reconciliado consigo mismo por medio de Cristo y nos ha confiado el ministerio de la reconciliación. Porque era Dios el que reconciliaba consigo al mundo en Cristo, no teniendo en cuenta los pecados de los hombres, y confiándonos el mensaje de la reconciliación. Somos, pues, embajadores de Cristo, y es como si Dios mismo los exhortara por medio de nosotros. En nombre de Cristo les suplicamos que se dejen reconciliar con Dios." Comentario: De acuerdo a San Pablo, Dios ha dado a la Iglesia el ministerio de la reconciliación.

Santiago 5,14-16 - "¿Está enfermo alguno de ustedes? Que llame a los presbíteros de la Iglesia para que oren sobre él y lo unjan con óleo en el nombre del Señor. La oración hecha con fe salvará al enfermo; el Señor lo restablecerá, y le serán perdonados los pecados que hubiera cometido. Reconozcan, pues, mutuamente sus pecados y oren unos por otros para que sanen." Comentario: Si bien sólo Dios puede perdonar los pecados, Santiago dice a los cristianos que busquen el perdón de Dios confesando sus pecados a otros en la comunidad-especialmente a los ancianos (los líderes designados o presbíteros) mencionados en el versículo 14.

Santiago 5,19-20 - "Hermanos míos, si alguno de ustedes se desvía de la verdad y otro lo convierte, sepa que el que convierte a un pecador de su mal camino, salvará su vida de la muerte y obtendrá el perdón de muchos pecados." Comentario: Ayudar a los pecadores a arrepentirse es una gran obra ante los ojos de Dios; así pues, es razonable pensar que Cristo haría de este ministerio de reconci-liación parte importante de la misión de la Iglesia.

ALGUNOS PENSAMIENTOS FINALES

Estos pasajes revelan claramente que Jesús confió Su ministerio de reconciliación a Su Iglesia. Por tanto, los católicos tienen razón al afirmar que la Penitencia o Reconciliación es un Sacramento que tiene un sólido fundamento bíblico.